Hoy, día 7 de octubre, la CSI celebra el Día Mundial del Trabajo Decente. Sindicatos en más de 100 países, desde el Pacífico Oriental hasta la costa oeste americana, se movilizarán este 7 de octubre para hacer frente a la crisis económica y de empleo global y exigir una reforma fundamental de la economía mundial. Organizaciones de más de 100 países han registrado ya sus actividades para la Jornada Mundial por el Trabajo Decente en el sitio web especial http://www.wddw.org/.
Están previstas movilizaciones a gran escala en numerosos países, mientras que en otros las acciones incluirán mítines públicos y reuniones en el lugar de trabajo, manifestaciones frente a los parlamentos nacionales, conciertos, contactos sindicales miembro-a-miembro en persona y por teléfono o correo electrónico, seminarios con la participación de sindicalistas, académicos y personalidades políticas, y eventos públicos en plazas y otros lugares públicos.
Ha señalado GUY RYDER, el Secretario General de la CSI, que "los desafíos a los que se está enfrentando el mundo actualmente no pueden ser utilizados como una excusa para amenazar y debilitar las normas del trabajo internacionalmente reconocidas. Debemos revertir la tendencia hacia el trabajo precario y la inseguridad, y continuar combatiendo las violaciones de los derechos de los trabajadores/as ahí donde se produzcan".
Un nuevo informe de la CSI se ha hecho público con ocasión de la Jornada Mundial por el Trabajo Decente, titulado El camino hacia la recuperación: Cómo el empleo es fundamental para poner fin a la crisis mundial, describe cómo, en respuesta a la crisis económica mundial, la peor desde la Gran Depresión, que está ocasionando la pérdida de millones de puestos de trabajo, la economía debe basarse en la justicia social y la sostenibilidad medioambiental, el respeto de los derechos de los trabajadores reconocidos internacionalmente, una regulación financiera efectiva y una gobernanza mundial que dé prioridad a las personas.
“Este 7 de octubre, los sindicatos elevan sus voces en todos los continentes para mantener la presión con vistas a un cambio fundamental, la justicia y la equidad. Deberán hacer frente a una enorme resistencia por parte de aquellos que se aprovecharon en el pasado de la explotación de los demás. Los sindicatos están determinados a confrontar y vencer esa resistencia, y a asegurarse de hacer llegar a todos los gobiernos del mundo el mensaje de que deben obtener los resultados que exigen los trabajadores y trabajadoras”, concluyó Ryder.
La represión de los derechos sindicales no es, desgraciadamente, un patrimonio de los países de la "periferia" del mundo. En el "centro" se siguen produciendo salvajes agresiones al derecho de libre sindicación. Un sólo ejemplo, denunciado por el sindicato británico de la construcción, es el descubrimiento de una oficina de "investigación" privada, pagada por las grandes empresas de la construcción, que elaboró una lista de mas de tres mil nombres de sindicalistas que no encontraron empleo a partir de su inclusión en esa "lista negra". El caso ha sido denunciado en esta página web : http://www.ucatt.info/content/view/760/30/, y ha sido objeto de un libro de denuncia que ha realizado el Institute for Employment Rights, bajo la dirección del profesor en la Universidad de Londres, Keith Ewing. Se puede consultar en inglés el sintético artículo de este catedrático de derecho laboral en el diario Morning Star en la siguiente página: http://www.morningstaronline.co.uk/index.php/news/features/Scourge-of-trade-unionist-blacklisting
No hay comentarios:
Publicar un comentario