INDIGNARSE NO ES SUFICIENTE

Acaba de publicarse un pequeño librito en el que Pietro Ingrao, con 96 años, es entrevistado por Maria Luisa Boccia y Alberto Olivetti a propósito del libro de Hessel "¡Indignaos!". El libro es una anticipación de un volumen mas extenso que aparecerá el año que viene, y en el diálogo se habla de muchas más cosas que no de una "glosa" al de Hessel, de la representación y acción política hasta de la poesía como expresión de la duda sobre la acción de la política. Lo ha publicado la editorial Aliberti y lo presentó el 30 de marzo en la librería Feltrinelli el parlamentario y exponente de la izquierda democrática Niki Vendola. A continuación se traduce una pequeña reflexión sobre el sentido de la noción de representación.

"En mi experiencia, representación ha sido algo muy diferente de delegación. La entendía como relación entre sujetos, y me planteaba continuamente el problema de esta relación: como construirla, con arreglo a qué reglas e intercambios podía ser más provechosa. Si la acción política como ejercicio de una forma participada y plural, desfallece, entonces la representación se convierte en una pura cuestión numérica, de legitimación o de deslegitimación de una casta de personas. Resulta mutilada, y es reducida a puro consenso o acuerdo. Hoy que la relación social se ha hecho más complicada, menos inmediata, se hace mucho caso a los números, y a menudo con la aritmética se comprime la riqueza de los conocimientos que esta relación social nos ofrece, nos da o nos quita, nos enriquece o nos anula. Hoy mas que nunca vivmos dentro de nosotros el conflicto no sólo entre conocimientos sino entre culturas presentes y diferentes. Estas trazas se reencuentran en las luchas sociales. Revueltas y protestas, insurrecciones corporativas de ruptura, conflictos y movimientos marcados en su diversidad por la carencia de una agregación política que las una y explique, o incluso con manifestaciones de desconocimiento al respecto. Hay tumulto, no estructuración, y esta es la otra cara de la crisis de la política. Hay un déficit declarado de representación. Pienso ante todo en los jóvenes, en la lucha de los estudiantes y de los investigadores de la universidad. Pueden parecer parciales las cuestiones que plantean, pero por el contrario aluden a problemas generales, de amplio alcance, que evocan nuevas formas de comunidad política. La política puede renacer, encontrar una nueva expansión si expresa las exigencias de vivencias personales socialmente determinadas. En algun modo, aquellos movimientos revelan el punto de crisis al que ha llegado la relación entre las instituciones políticas y las demandas que agitan la sociedad ".